Encuentro Abay Guardamar del Segura

Sí, lo sé, este post llega cómo…20 días tarde… pero es lo que hay!! Soy así de tardona.

Eso sí, no se me olvidará ese día jamás. Se quedará en mi memoria, guardadito, junto con el encuentro en Xeresa y otros momentos muy especiales. Porque en días cómo este, en los que puedo compartir el tiempo con gente que sigue, siguió o seguirá el mismo camino que nosotros para ser padres y con sus hijos, hace que me sienta por un día muy cerquita de nuestro hijo. Y lo disfruto, a tope, mucho!!

Cuándo llegué, iba hablando con Fátima por el móvil, estábamos hablando de Nür, a quien acababan de asignar, y yo le decía “aysss, ójala vinieran hoy al encuentro”… Y allí estaban!! Con la foto de su precioso Xavi poniéndonos a todos los dientes largos y el corazón a punto de explotar de alegría y ternura. Nür no soltó la foto en todo el día y los demás necesitábamos repasarla cada 10 minutos.

Me volvía a encontrar con la gente de Abay que ya conocía, con los niños, conocí a un montón de gente en distintas fases del proceso… y fui feliz. Casi a punto de sentarnos a comer llegó Sonia con su familia!! Qué ganas tenía ya de conocerla!! Ester, a ver si se cura ya tu ordenador y nos pasas la foto, que tengo muchas ganas de tenerla y colgarla. Y a la hora de comer, descubría la injera… qué buena estaba!! Después de comer cafetito etíope, con ceremonia incluida, que me encantó. Grabé un video de uno de los gemelos de Ruth bailando, que me encanta(perdonadme chicos, pero ese día fui incapaz de distinguiros) . Y luego, mientras los chicos dibujaban, saqué un rollo que había comprado y merendaron todos (o eso espero). Como véis, un sueño de día.

Además, ese día, por fin, nos permitimos comprarle a nuestro peque su primera cosita. Y como no podía ser de otra forma, es un libro, que la mare no puede evitarlo. Con la ropita y los muebles, me controlo… no sé si será niño o niña, qué edad tendrá, si vendrá en verano o en invierno… pero los libros, antes o después, sa mare li’ls llegirà (su mamá se los leerá).

Y cómo no podía ser de otra manera, este fué el elegido. El libro es precioso, no me canso de leerlo y mirar los dibujos. De verdad, Silvia, muchas felicidades, porque no creo que lo pudieráis haber hecho mejor. A partir de ahora aquí está el libro, Esperándote, com el pare i la mare.

 

Pd: Me he atrevido a poner las fotos sin permiso, porque me parece que no se distingue a ningun peque, y menos así en collage, pero si alguien no quiere que aparezca alguna foto que deje un comentario y la quito enseguida.